La niña de 10 años llamó al 911 después de romper una ventana para escapar de su casa tras golpiza
BRYAN, TEXAS — Ricky Hernández, de Bryan, fue sentenciado el viernes a la pena máxima de 10 años de prisión por herir a un niño y luego fue sentenciado a 12 años de prisión por dos cargos de agresión agravada con un arma mortal, según un comunicado de prensa de la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Brazos.
El 3 de abril de 2022, la policía de Bryan fue enviada después de que la hija de 10 años del acusado llamara al 911 para informar que el acusado la había atacado.
La policía se reunió con la víctima y la encontró con múltiples heridas visibles en la cara por haber sido golpeada por el acusado. El acusado estaba ebrio y se enojó cuando su hija se negó a darle un abrazo. Luego le dio un puñetazo en la cara y la arrojó al otro lado de la habitación, según el fiscal del distrito.
La víctima escapó rompiendo una ventana, corriendo hacia los vecinos y llamando a la policía. En el momento de la lesión a un niño, el acusado se encontraba en libertad bajo fianza por asalto agravado con un arma letal en College Station, según el informe del fiscal del distrito.
Tras este nuevo delito, las autoridades arrestaron a Hernandez y suspendieron su libertad condicional, en relación a un incidente de violencia previo donde Ricky Hernandez se encontraba en un bar de la localidad donde tuvo un altercado verbal con una persona. Al salir del bar, ambos iniciaron un altercado físico donde Hernandez apuñaló a un par de personas que fueron trasladadas al Hospital Baylor Scott and White. Ambas víctimas habían sufrido heridas de arma blanca en el área del pecho, según el informe del fiscal del distrito.
El video del teléfono celular de los transeúntes reveló que Hernández comenzó el altercado físico fuera del bar y apuñaló a ambas víctimas. El acusado huyó antes de la llegada de la policía.
En total Ricky Hernandez deberá permanecer 22 años en prisión de llevarse a cabo el cumplimiento de ambas sentencias en total.
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